A menudo, en las fiestas (a las que evito concurrir siempre que puedo) alguien me da un fuerte apretón de manos, sonriendo, y después me dice, con aire de jubilosa conspiración: "Sabe, siempre he deseado escribir."
Antes, yo trataba de ser amable.
Ahora, contesto con la misma regocijada excitación: "Sabe, siempre he deseado ser neurocirujano."
Me miran con perplejidad. No importa. Últimamente circula por el mundo mucha gente perpleja.
Si quieres escribir, escribes.
Sólo escribiendo se aprende a escribir. Y ése, en cambio, no es un buen sistema para enfrentarse a la neurocirugía.
-JOHN D. MACDONALD-

miércoles, 24 de noviembre de 2010

La Chaqueta Metálica (I)






HARTMAN: Soy el Sargento de Artillería Hartman, vuestro instructor jefe. A partir de ahora únicamente hablareis cuando se os hable. Y la primera y la última palabra que saldrá de vuestros sucios picos será señor. ¿Me entendeis bien, capullos?
TODOS: ¡Señor, si, señor!
HARTMAN: ¿Qué coño? ¡No os oigo. ¡Gritad como si tuvierais huevos!
TODOS: ¡SEÑOR, SI, SEÑOR!
HARTMAN: Si alguno de vosotros, nenas, sale de esta isla, si sobrevivís al entrenamiento, seréis como armas; ministros de la muerte, siempre en busca de la guerra. Pero hasta ese día sois una cagada. Lo más bajo y despreciable de la tierra. Ni siquiera algo que se parezca a un ser humano. Sólo sois una cuadrilla de desgraciados. Una panda de mierdas inútiles pasados por agua. Como soy muy duro se que no voy a gustaros, pero cuanto peor os caiga mejor aprenderéis. Soy duro pero soy justo, y aquí no hay ninguna intolerancia racial. Yo no desprecio a nadie por que sea negro, judío, latino o chicano. Aquí todos sois igual de insignificantes. Y mis órdenes son acabar con todos aquellos que no sean capaces de dar la talla en mi amado cuerpo. ¿Me entendéis, capullos?
TODOS: ¡SEÑOR, SI, SEÑOR!
HARTMAN: ¡Coño, más alto, no os oigo!
TODOS: ¡¡¡SEÑOR, SI, SEÑOR!!!
HARTMAN: ¿Cómo te llamas, pichafloja?
RECLUTA COPO DE NIEVE: ¡Señor, Recluta Brown, señor!
HARTMAN: Desde ahora te llamas recluta Copo de Nieve. ¿Te gusta el nombre?
RECLUTA COPO DE NIEVE: ¡Señor, si, señor!
HARTMAN: Pues te voy a decir una cosa que no te va a gustar, Copo de Nieve. Aquí en mi cantina no vas a poder comer todos los dias pollo frito y sandía.
RECLUTA COPO DE NIEVE: ¡Señor, si, señor!
RECLUTA BUFÓN: ¿Eres tu John Wayne, o soy yo?
HARTMAN: ¿Quién ha dicho eso? ¿Quién coño lo ha dicho? ¿Dónde está ese comunista de mierda, la maricona soplapollas que acaba de firmar su sentencia de muerte? ¿Nadie, eh? Por lo visto ha sido la reina de los mares. Os voy a triturar, vais a hacer ejercicio hasta reventar. Vais a hacer instrucción hasta que se os quede el culo como mantequilla. ¿Has sido tú, rata asquerosa? ¿¡Eh!?
RECLUTA COWBOY: ¡Señor, no, señor!
HARTMAN: Eres un cagao y pareces un gusano inmundo. Juro que fuiste tú.
RECLUTA COWBOY: ¡Señor, no, señor!
RECLUTA BUFÓN: ¡Señor, fui yo, señor!
HARTMAN: Vaya, no me jodas. ¿Qué tenemos aquí? ¿Un jodido bromista? ¿Un bufón? Admiro tu honradez. Si coño, me gustas tanto que te invito a mi casa a tirarte a mi hermana. Sólo eres un pichafloja. Me quedo con tu nombre y me quedo contigo. No te vas a reir, ni vas a llorar. Vas a aprender de carrerilla. Yo te voy a enseñar. Y ahora levanta. ¡Ponte en pie! Mejor será que no me encabrones, porque si no te abro la cabeza y te follo hasta el hígado.
RECLUTA BUFÓN: ¡Señor, si, señor!
HARTMAN: Recluta Bufón, ¿para qué te alistaste en mi amado cuerpo?
RECLUTA BUFÓN: ¡Señor, para matar, señor!
HARTMAN: ¿Te gusta matar?
RECLUTA BUFÓN: ¡Señor, si, señor!
HARTMAN: A ver, pon cara de pelea.
RECLUTA BUFÓN: ¿Señor?
HARTMAN:  Es eso cara de pelea? ¡AAAAAAHHH! Esto si es cara de pelea. Venga, pon cara de pelea.
RECLUTA BUFÓN: ¡AAAAAAAHHH!
HARTMAN: ¡Puta mierda! No me convences, pon cara de pelea de verdad.
RECLUTA BUFÓN: ¡¡¡AAAAAAAHHH!!!
HARTMAN: No me das miedo. ¡Sigue con ello!
RECLUTA BUFÓN: ¡Señor, si, señor!
HARTMAN: ¿Cuál es tu excusa?
RECLUTA COWBOY: ¿Señor, excusa de qué, señor?
HARTMAN: Yo soy el único que hace preguntas aquí. ¿Lo entiendes, recluta?
RECLUTA COWBOY: ¡Señor, si, señor!
HARTMAN: Te lo agradezco mucho basura. Ahora, ¿me dejas continuar?
RECLUTA COWBOY: ¡Señor, si, señor!
HARTMAN: ¿Qué te pasa? ¿Esta nervioso?
RECLUTA COWBOY: Señor, lo estoy, señor.
HARTMAN: ¿Te pongo yo nervioso?
RECLUTA COWBOY: Señor...
HARTMAN: ¿¡Señor qué!? ¿¡Estabas a punto de llamarme gilipollas!?
RECLUTA COWBOY: Señor, no, señor.
HARTMAN: ¿Cuánto mides recluta?
RECLUTA COWBOY: ¡Señor, 1,80, señor!
HARTMAN: ¡1,80! No sabía que una mierda podía ser tan alta. ¿Quieres meterme unos centímetros de clavo, eh?.
RECLUTA COWBOY: ¡Señor, no, señor!
HARTMAN: ¡Chorradas! Me parece que la leche de tu padre entró por el culo de tu mamá y acabó como una manchita marrón en la sábana. ¡Te han tomado el pelo! ¿Y de donde coño eres, recluta?
RECLUTA COWBOY: Señor, de Texas, señor.
HARTMAN: ¡¡Noooo me jodas!! En Texas solo hay vacas y maricones, recluta Cowboy, y tú no te pareces mucho a una vaca. Así que ya sabemos lo que eres. ¿Te gusta mamar pollas?.
RECLUTA COWBOY: ¡Señor, no, señor!
HARTMAN: ¿No te tragas los rabos?
RECLUTA COWBOY: ¡Señor, no, señor!
HARTMAN: Tu debes de ser de esos tipos desagradecidos, que cuando están dando por el culo no tienen ni el detalle de hacerle una paja al otro. No te perderé de vista.
HARTMAN: ¿A tus padres les queda algún hijo vivo?
RECLUTA PATOSO: ¡Señor, si, señor!
HARTMAN: Seguro que están arrepentidos. Eres tan feo que podrías estar en un museo de arte moderno. ¿Cómo te llamas, gordo de mierda?
RECLUTA PATOSO: ¡Señor, Leonard Lawrence, señor!
HARTMAN: ¿Lawrence? ¿Lawrence de qué? ¿De Arabia?
RECLUTA PATOSO: Señor, no, señor.
HARTMAN: Ese nombre me suena a realeza. ¿Eres tú de la casa real?
RECLUTA PATOSO: Señor, no, señor.
HARTMAN: ¿Te gusta mamar pollas?
RECLUTA PATOSO: Señor, no, señor.
HARTMAN: Tu chuparías hasta una pelota de golf metida en una manguera.
RECLUTA PATOSO: Señor, no, señor.
HARTMAN: No me gusta lo de Lawrence. Sólo los maricones y los marineros se llaman Lawrence. Desde hoy serás el recluta Patoso.
RECLUTA PATOSO: ¡Señor, si, señor!
HARTMAN: ¿Te parezco un listillo, recluta Patoso? ¿te parezco gracioso?
RECLUTA PATOSO: ¡Señor, no, señor!
HARTMAN: Entonces borra esa sonrisita de tu cara.
RECLUTA PATOSO: ¡Señor, si, señor!
HARTMAN: ¿A qué coño estás esperando, corazón?
RECLUTA PATOSO: ¡Señor, lo intento, señor!
HARTMAN: Reculta Patoso, te doy 3 segundos. Exactamente 3 puñeteros segundos para que borres esa estúpida sonrisa de tu cara, si no quieres que te saque los ojos y empiece a correrme en tu mollera. ¡1...2...3!
RECLUTA PATOSO: Señor, no puedo, señor.
HARTMAN: ¡Chorradas!, ponte de rodillas, pichafloja. Ahora ahogate. ¡No me jodas! Con mi mano, caraculo. No tires de mi mano hacia ti, he dicho que te ahogues no que te ahogue yo. Venga, ven hacia aquí, y ahógate. ¿Has acabado de sonreír?
 RECLUTA PATOSO: Señor, si, señor.
HARTMAN: Más alto coño. No te oigo.
RECLUTA PATOSO: ¡Señor, si, señor!
HARTMAN: Sigo son oírte. Grita como si tuvieras 2 cojones.
RECLUTA PATOSO: ¡¡Señor, si, señor!!
HARTMAN: Así está bien, ponte en pie. Recluta Patoso, quiero que pierdas el culo hasta que cagues pepitas de oro sobre mi cabeza, y si no lo haces te voy a joder vivo.
RECLUTA PATOSO: ¡Señor, si, señor!

No hay comentarios:

Publicar un comentario